Durante la celebración llevada a cabo en Madrid para festejar la consecución de la Eurocopa conseguida en Polonia y Ucrania, Pepe Reina, portero del Liverpool y de la Selección Española, definió a “La Roja”, ante los miles de aficionados que había en torno a la fuente de la Cibeles, como “Un equipo de leyenda”. Desde luego, la definición de Reina fue, al menos en mi opinión, realmente acertada. Y es que España hizo historia dentro del terreno de juego, pero todos los jugadores forman un EQUIPO (escrito con mayúsculas porque son un grupo realmente unido) que ya se ha convertido en leyenda.
El domingo, en Kiev, España pasó a la historia tras golear a Italia (4-0) en la final de la Eurocopa al conseguir la mayor goleada en una final de esta competición y al ser la primera selección nacional que consigue Eurocopa-Mundial-Eurocopa de forma consecutiva.
De esta forma continúa un ciclo ganador que comenzó en la Eurocopa de Austria y Suiza del año 2008, en la que España puso fin a la “maldición de cuartos” tras eliminar a Italia en los penaltis y conseguir así el pase a semis, donde “La Roja” se enfrentó y venció a Rusia. En la final de ese torneo Fernando Torres hizo el gol de la victoria ante Alemania y, de paso, puso los cimientos del bloque sólido en el que se ha convertido ahora la Selección Española.
Conviene recordar que en aquel cercano 2008 el gol de Torres puso los cimientos y las primeras piedras de un estilo de juego que sigue siendo exitoso e inalcanzable, pero tampoco hay que olvidar que el maestro de obra que dibujó los planos de tan ambicioso proyecto fue Luis Aragonés, un hombre que es un auténtico ganador nato y que tiene ganado a pulso el apodo de “El Sabio”.
Tras Aragonés llegó Vicente Del Bosque, un técnico que, inteligentemente, respetó y siguió las líneas marcadas por el seleccionador que llevó a España a lograr su segunda Eurocopa. Reforzó a los pilares (Casillas, Sergio Ramos, Puyol, Xavi, Iniesta, Xabi Alonso, Villa y Fernando Torres) e hizo crecer a otras figuras que en 2008 ya se veían como piezas fundamentales para el futuro, como David Silva y Cesc Fábregas (más tarde se añadió Gerard Piqué, quien, recordemos, no formó parte de la Selección Española campeona en la “Euro” de 2008).
Sin embargo, el gran acierto de Del Bosque fue seguir confiando en el estilo de juego que marcó Aragonés, un estilo de toque y paciencia que, con los distintos retoques que le ha dado el salmantino, ha sido la clave para lograr el éxito en el Mundial de Sudáfrica y para revalidar en Polonia y Ucrania el título de Eurocopa.
De esta forma, en apenas cuatro años España se ha convertido en la referencia futbolística mundial y ha escrito su nombre en la historia gracias a conseguir un triplete que hasta ahora nadie había logrado, y en el que se consiguió la Euro de 2008, el Mundial de 2010, y la Euro de 2012. Además, lo ha conseguido con una forma de juego que maravilla a todo el planeta.
Sin embargo, lo que más me impresiona de esta Selección Española de LEYENDA es que, como señalaba al principio, son un auténtico equipo. “La Roja” está formada por deportistas y un cuerpo técnico de élite que, sin embargo, saben mantener los pies en el suelo. Todos juntos forman un grupo humano realmente excelente que rema en la misma dirección y que prioriza los éxitos del conjunto por encima de los personales. Como ejemplo de esto podemos ver el cuarto gol de España a Italia, en el que Torres estaba mano a mano con Buffon y, en vez de intentar marcar un gol que además le aseguraría la “Bota de Oro” de la Eurocopa (trofeo que el madrileño acabó consiguiendo finalmente) decidió cederle el balón a Juan Mata para que este, que estaba en una posición mejor, cerrase una goleada histórica.
Deportividad, humildad y esfuerzo son algunos de los conceptos que definen a la Selección Española, un equipo formado por futbolistas que demuestran que son de los mejores del mundo tanto dentro como fuera del campo de juego. Sobre el césped enseñan su calidad futbolística, y fuera de él dan auténticas lecciones de cómo se debe mantener siempre los pies en el suelo tanto en la derrota como, sobre todo, en la victoria.
Todos ellos saben que tienen una gran responsabilidad porque son ejemplo para mucha gente, sobre todo para los jóvenes, que les tienen como referentes. Por esta razón tienen el respeto y la humildad como principios, algo que, por ejemplo, pudo verse cuando Íker Casillas, el capitán de “La Roja”, le dijo en el tiempo de descuento de la segunda parte a uno de los árbitros que pitaban la final ante Italia que no añadiesen más tiempo porque el marcador ya era de 4-0 y había que respetar al combinado italiano. Este gesto ha sido muy bien valorado en Italia, donde han elogiado la actitud del portero español.
Este sentido de equipo de la Selección Española también se puede ver en gestos como el del portero Pepe Reina. A pesar de no haber jugado ni un solo minuto en esta Eurocopa ha sido uno de los que con más pasión ha vivido cada uno de los partidos. Guarda una magnífica relación con todos sus compañeros y, como se pudo ver en la celebración de ayer en Madrid, es uno de los que mejor sentido del humor tiene de todo el equipo, ya que se convirtió en el “speaker” y fue presentando, en tono de humor, a todos y cada uno de los jugadores del equipo y, como no, también tuvo palabras de elogio hacia Del Bosque. Además, Reina dejó para la eternidad esa magnífica definición de lo que es ahora mismo la Selección Española: “Un equipo de leyenda”.
Se han escrito libros (y se seguirán escribiendo) hablando sobre las virtudes de esta Selección, ya que son muchísimas y muy buenas, pero a mí se me acaba el espacio de este artículo. Sin embargo, no quiero concluir sin mencionar a dos grandes personas: Andrés Iniesta y Vicente Del Bosque.
Iniesta, héroe en el Mundial de Sudáfrica y nombrado Mejor Jugador de la Eurocopa de 2012, demostró su grandeza cuando habló ante los miles de personas que estaban en Cibeles y dijo que se enorgullecía del logro cosechado por ver tantas caras de felicidad “en estos momentos difíciles”.
Por su parte, Vicente Del Bosque, quien con esta "Euro" igualó al técnico alemán Helmut Schoen como únicos entrenadores que han levantado un Mundial y una Eurocopa, decidió mantenerse en un segundo plano durante las celebraciones. Quería que los protagonistas fueran los futbolistas, a pesar de que el salmantino también ha sido una pieza imprescindible para cosechar estos logros históricos.
Del Bosque e Iniesta son dos claros ejemplos de humildad, prudencia, responsabilidad y deportividad, como también lo son Casillas, Xavi, Silva, Reina, Puyol, Villa, Xabi Alonso, Llorente, Jesús Navas… y todos aquellos (incluyendo, por supuesto, al cuerpo técnico) que conforman este gran EQUIPO.
Lo mejor de estas victorias es observar que van más allá del plano deportivo. Todos estos campeones lo son porque saben jugar muy bien al fútbol, o porque saben preparar técnica y físicamente al equipo, pero también porque son excelentes personas. Todos saben que lo prioritario es el bien del grupo y, por eso, todos colaboran para alcanzar los objetivos tanto si les toca jugar los partidos como si no. Quizás por esto la victoria sabe aún mejor. Quizás por esto los millones de personas que en todo el mundo celebramos el triunfo de “La Roja” nos sentimos tan orgullosos de la Selección Española.
