El París Saint Germain logró este domingo sus tres primeros puntos de la temporada tras vencer 2-1 en el Parque de los Príncipes a un Valenciennes que le puso las cosas muy difíciles al equipo parisino. Además del triunfo, la buena noticia fue que al fin se produjo el tan esperado debut en la Ligue 1 del genial futbolista argentino Javier Pastore.
Triunfo luchado, elaborado, trabajado, y sobre todo merecido del PSG dirigido por Antoine Kombouaré que parece ir de menos a más, ya que con estos tres puntos se resarce del empate cosechado la jornada pasada ante el Rennes, y de la derrota en el primer partido ante el Lorient.
Los capitalinos salieron con todo en busca de la victoria. Kevin Gameiro como referencia en ataque, Jeremy Menez por la derecha, el fabuloso zurdo brasileño Nené por la izquierda, Bodmer en mediapunta, y Chantome y Matuidi en medio campo, siendo el primero el encargado de hacer las transiciones de defensa a ataque. Sí, entre todos estos nombres falta el de Javier Pastore, pero lo bueno se hace esperar.
El PSG fue superior y creó mayor peligro sobre la portería de Penneteau, pero el Valenciennes se plantó bien en el campo y supo aguantar bien la presión con un sistema 1-4-1-4-1 en el que el colombiano Carlos Sánchez actuaba como libre entre la línea de medio campo y la de defensa, y Gregory Pujol , como único delantero, se encargaba de poner en peligro el arco de Sirigu.
Pero este año el París Saint Germain se ha reforzado muy bien y fueron dos de las novedades los encargados de abrir el marcador. El ex de la Roma, Jeremy Menez, cogió el balón en medio campo y arrancó en velocidad iniciando un contraataque que acabaría con un pase al espacio libre que Kevin Gameiro aprovechó definiendo con maestría, picando el balón con la zurda y superando a Penneteau para hacer el 1-0 y calmar los ánimos de una afición que empezaba a impacientarse.
La cosa pintaba bien para el equipo local, pero el Valenciennes no dijo su última palabra y en el descuento de la primera mitad hizo gritar de alegría a su afición cuando Remi Gomis cabeceó a la red un buen centro desde la derecha ante el que nada pudo hacer Sirigu, y puso el empate a uno en el marcador justo antes del descanso.
Este último gol no entraba en los planes de un Kombouaré que en la segunda mitad decidió actuar rápido y con contundencia, y mandó a calentar a la gran figura: Javier Pastore.
El ex futbolista de Huracán y del Palermo recibió los aplausos de la afición que llenaba el Parque de los Príncipes mientras se ejercitaba, hasta que finalmente el técnico decidió que era el momento de su debut en Liga (ya jugó en la Europa League).
Y saltó al césped en sustitución de Matuidi, lo cual hizo de Bodmer se colocase en medio campo, y “El Flaco” ocupase la posición de mediapunta. Por delante tenía aún media hora de juego.
Ya desde muy pronto dejó destellos de su calidad, cuando con un par de filigranas salió airoso de la presión de dos rivales que le presionaban la zona del córner. Durante todo el encuentro dejó varias “delicatessen” a las que a no mucho tardar se acostumbrará la afición del PSG.
Poco tiempo después de esta sustitución llegó el 2-1 para el París Saint Germain, cuando el árbitro señaló una mano de Ducourtioux dentro del área e indicó el punto de penalti. Nené fue el encargado de transformarlo con un buen disparo con la zurda que engañó por completo al meta corso Penneteau.
Independientemente de los detalles técnicos, Pastore aún tiene que ganar tono físico, algo que adquirirá a base de entrenamientos, preparación física, y por medio de ir ganando minutos y entrando poco a poco en el once inicial de Antoine Kombouaré.
Buen debut del argentino Javier Matías Pastore, que a punto estuvo de dar su primera asistencia de gol con un balón buenísimo al espacio libre que Gameiro tiró alto, y que además fue muy positivo por la victoria y porque al fin se vio sobre el campo al que será gran referencia de un París Saint Germain que opta a todo tanto en la Ligue 1 como en la Europa League.