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| Mario Götze tiene un gran futuro futbolístico. Foto: goal.com |
Mario Götze nació el 3 de junio de 1992 en Memmingen, Alemania. Tiene 18 años, es diestro, juega de banda derecha aunque también puede desempeñarse como mediapunta, mide 1,76 metros y defiende el escudo del Borussia Dortmund, equipo al que llegó cuando tenía 9 años.
En los últimos años, Alemania está llevando a cabo un proceso en el que la juventud se está convirtiendo en la gran referencia de su selección nacional. En la Eurocopa de Austria y Suiza de 2008 primero, y en el Mundial de Sudáfrica 2010 después, en la “Mannschaft” aparecieron talentos como Khedira, Schweinsteiger, Lahm, Özil, Müller, Mario Gómez o Podolski entre otros. A todos ellos se unirá en un futuro no muy lejano Mario Götze. Tanto es así que el 17 de noviembre de 2010 Joachim Löw le hizo debutar con la absoluta en un amistoso contra Suecia. Jugó doce minutos, pero más allá de eso estaba el aviso por parte del seleccionador de que encaja en sus planes. No sería extraño verle en la Eurocopa de Polonia y Ucrania 2012…
Sin embargo, para que se apueste por alguien a nivel de selecciones primero debe hacerse en su propio club. Y efectivamente así ocurrió.
Con tan sólo 17 años debutó en noviembre de 2009 de la mano de Jürgen Klopp en un partido contra el Mainz 05 en el que jugaba, y juega, su hermano Fabian Götze. Desde entonces Mario se ha ido haciendo poco a poco con un hueco en el once titular del conjunto “borusser” hasta convertirse hoy en día en una pieza clave.
Klopp apuesta firmemente por la juventud, y lo demuestra teniendo una plantilla con una media de edad que no llega a los 24 años y dándole oportunidades a los valores de la cantera. Sin embargo, este riesgo se tiene que ver recompensado con el esfuerzo de aquellos a los que se les dan esas ocasiones y Götze no las desaprovechó.
La verdad es que Mario es uno de esos jugadores que les debe plantear cien mil quebraderos de cabeza a los entrenadores rivales cuando planifican el encuentro contra el Dortmund.
El 31 “borusser” forma una tripleta atacante temible con Lucas Barrios y Shinji Kagawa, por lo que no se pueden centrar todos los recursos defensivos en él porque cualquiera de los otros dos resulta peligroso.
No se le puede dejar campo libre porque cuando coge el balón echa a correr con el esférico pegado al pie y en un abrir y cerrar de ojos se ha plantado en la frontal del área. Una vez allí decide en milésimas de segundos la mejor opción que plantea la situación, desde tirar buscando el gol hasta dar el último pase metiendo el balón por el único hueco posible.
Además, crea y aprovecha los espacios libres a la perfección. Cuando el juego se atasca por la banda se va al medio a recibir el balón, arrastrando así a su marcador y permitiendo la subida del lateral en carrera para que sea él quien meta el balón al área. Si por el contrario el espacio está creado, Götze lo ocupa rápidamente y pide el balón para montar el contraataque. En ocasiones es Sahin el encargado de nutrirle de balones, aunque a veces el envío se produce directamente desde la defensa con un balón directo.
Pero los recursos de Mario no acaban ahí. Tiene un gran dominio del balón y mucha velocidad en sus movimientos, lo cual le permite zafarse de varios jugadores que le entran casi a la vez. En una combinación de interior y exterior de su bota derecha los deja atrás para continuar con su camino. Como se suele decir, es capaz de jugar “en una baldosa” y a veces parece más un jugador de fútbol sala. Además, su estatura le permite dos cosas: Mantener el equilibrio ante las entradas de los rivales y con ello seguir en posesión del balón y entrar de forma sorpresiva por el segundo palo para cabecear un centro llegado desde la izquierda. Y es que, a pesar de su 1,76 metros de altura, el joven talento alemán sabe lo que es marcar con la testa.
Gran jugador Mario Götze. Un futbolista muy a tener en cuenta.
