El Clásico de mañana muestra varias cosas aparte del enfrentamiento entre los equipos más grandes de España. También se ponen en liza dos propuestas de entender el fútbol tanto a nivel institucional como deportivo. Vamos a verlo.
FILOSOFÍA:
La filosofía la plantea el F.C. Barcelona. (Con esto no quiero hacer referencia al desacertado comentario que hizo Ibrahimovic sobre Pep Guardiola cuando se fue del Barça llamándole “filósofo”). Porque su proyecto a nivel de club se basa en la apuesta por la cantera y en practicar un fútbol de toque que ha servido de espejo a muchos equipos del mundo, entre ellos a “La Roja”.
Los blaugranas se basan en la defensa a ultranza de un estilo que les ha hecho ganar ocho títulos en apenas dos años, los mismos que lleva Pep Guardiola al mando de la nave (este es el tercero). Desde entonces, el juego del equipo ha sido impecable y, además, siendo piezas clave jugadores de la cantera. Además de Valdés, Puyol, Xavi o Iniesta, se unieron Piqué, Busquets, Pedro, Jeffrén y Bojan. Además, el futuro pinta bien para jugadores como Thiago Alcántara, Jonathan Dos Santos o Andreu Fontás que poco a poco van gozando de oportunidades en el primer equipo.
Otro aspecto a destacar de la filosofía del Barça es el hecho de no hacer gastos desorbitados a la hora de fichar. Gracias a su política de cantera no necesitan incorporar muchos nombres a la plantilla cada verano. Con Joan Laporta como presidente (aún es pronto para analizar la gestión de Sandro Rosell en el tema de fichajes) se hicieron dos fichajes especialmente costosos por precio y bajo rendimiento: Zlatan Ibrahimovic y Chygrynskiy. Sin embargo, otros como Dani Alves o Villa sí han merecido la pena. (Hay que esperar al final de temporada para analizar al asturiano de forma definitiva).
EFECTIVIDAD:
Esto es lo que busca y lo que está encontrando el Real Madrid. Los blancos llevan varios años buscando una estabilidad institucional que les lleve a lo más alto a nivel europeo. Esa firmeza parece que llegó con el retorno de Florentino Pérez, pero los resultados aún se están haciendo esperar a pesar del espectacular gasto que realizaron la temporada pasada. En la presente campaña los fichajes han sido más modestos económicamente pero están dando muy buen rendimiento, sobre todo Özil y Di María. Ya lo dijo Jorge Valdano: “El fichaje estrella será el entrenador”. Y así fue.
Tras lograr el triplete con el Inter de Milán, José Mourinho llegó a la capital de España con la etiqueta de “gran remedio contra el Barça”. El planteamiento del portugués es sencillo: Hay que ganar y poco importa cómo se haga. Así lo hizo con los “neroazzurri” y le dio un resultado inmejorable. Las urgencias del Real Madrid exigían un estratega como él, alguien que supiese trabajar en situaciones de mucha presión y al que se le pudiera pedir resultados inmediatos. Aún así, “Mou” se encarga de recordar a la prensa y a los aficionados (e indirectamente a la directiva) de que sus equipos funcionan a partir del segundo año que están con él.
El guión se está cumpliendo a la perfección: El equipo no es la panacea del buen juego pero actualmente son líderes del campeonato liguero, han pasado a octavos de Champions como primeros de Grupo y en el Bernabéu están aún invictos en Liga.
En resumen, así son a grandes rasgos los dos protagonistas del duelo de mañana. Ambos estilos de club son dispares, pero están representados en la figura de los líderes de ambos banquillos. Pep Guardiola es serenidad, confianza, talento… José Mourinho es exigencia, carácter, eficacia… En fin, a ambos se les puede definir con numerosos adjetivos pero los dos tienen una característica en común: Son sinónimo de éxito.
Esperemos que el Clásico entre F.C. Barcelona y Real Madrid sea todo un espectáculo, que se vean goles y sobre todo, que no hayan incidentes.
¡¡¡Que gane el mejor!!!
