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viernes, 10 de septiembre de 2010

CUANDO LA ANSIEDAD NO PUDO CON KIKO FEMENÍA

En ocasiones me he preguntado cómo sería jugar delante de 30.000 personas en Primera División. La verdad es que tiene que ser precioso, pero también conlleva una enorme responsabilidad. La siguiente historia tiene como protagonista a Kiko Femenía, el jugador más prometedor que posee la plantilla del Hércules, en su partido de debut en Primera. Al poco de entrar, le entra un ataque de ansiedad que, con ayuda de sus compañeros, consigue superar.


Kiko Femenía está llamado a ser una pieza importante en el Hércules.
Foto: Marca.com

Seis de la tarde del sábado 29 de agosto de 2010. El Hércules vuelve a la máxima categoría del fútbol español tras trece años, y lo hace debutando en casa ante el Athletic de Bilbao. Por si fuera poco, era el partido inaugural de la temporada 2010/11 y el estadio José Rico Pérez estaba lleno con casi 30.000 espectadores, 4.000 de ellos llegados desde Bilbao.

Ya en la segunda parte, Llorente marca de cabeza el 0-1 para el Athletic. Ahora le tocaba responder al Hércules y para ello, Esteban Vigo decide hacer un cambio. Abel Aguilar se marcha y entra en su lugar Kiko Femenía.

Este joven jugador, de tan sólo 19 años, fue clave la temporada pasada para el Hércules. Jugó 35 partidos y marcó 3 goles, siendo imprescindible en el once inicial del equipo alicantino durante todo el año. Esteban Vigo confió en él y le dio la alternativa de hacerse grande en un club histórico como éste. Por su parte, la afición le adora. La hinchada blanquiazul tiene muchas esperanzas puestas en él, ya que creen que puede hacer historia en el conjunto herculano.

La sustitución se consumó, y a Kiko le tocaba ser el revulsivo que tanto necesitaba su equipo. Sin embargo, las cosas no le salieron bien en los primeros balones que tocó. Fallos en pases sencillos, errores en los controles de balón… y todo ello el día que debutaba en Primera División. Esto le bloqueó y la ansiedad le invadió.

A partir de aquí hubo un factor muy importante: El apoyo de sus compañeros. Ellos se dieron cuenta de que Kiko no estaba bien e intentaron ayudarle en todo momento. De todos ellos destacó Rufete; un jugador ya veterano, curtido en mil batallas, que ha jugado en los campos más impresionantes de Europa y que no paró de animar a Kiko desde la banda, ya que estaba de suplente. Le aconsejó que respirase, que estuviese tranquilo, y le alentó cuando comenzó a hacer las cosas bien.

La afición también se dio cuenta de esta situación y no dudó en aplaudirle cada vez que recibía el balón. Todo esto fortaleció al joven talento alicantino que, incluso, dejó detalles de calidad en los últimos minutos de encuentro.

Kiko no pudo evitar que su equipo perdiera el partido, pero ese día, él consiguió una gran victoria: Venció a la ansiedad.

El programa de Canal +, “El Día Después”, emitió un reportaje en el que mostró esta situación. Se ve y escucha cómo Rufete le anima, y los aplausos llegados desde la grada del José Rico Pérez. Si quieres verlo, pincha en el enlace de “Fuente”.


FUENTE:

Vídeo del programa “El Día Después” de Canal +: http://www.youtube.com/watch?v=ArUEoKNLvVU